Durante su primera visita oficial a la frontera sur, el vicepresidente de Estados Unidos, J.D. Vance, afirmó que el gobierno de Donald Trump no desea mantener una “relación negativa” con México. En un recorrido por la zona fronteriza entre Texas y Coahuila, Vance destacó la importancia de la cooperación bilateral en temas como el narcotráfico y la migración irregular.
En una reunión de trabajo que contó con la participación del secretario de Defensa, Pete Hegseth, y otras figuras clave como el gobernador de Texas, Greg Abbott, y la directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, Vance abordó los avances en la detención de migrantes y las estrategias para combatir a los cárteles de la droga. “El presidente (Trump) dijo que no necesitábamos nuevas leyes para asegurar la frontera. Necesitábamos un nuevo presidente y gracias a Dios lo tenemos”, declaró el vicepresidente.
Vance subrayó que el gobierno estadounidense tiene la esperanza de que México tome en serio la lucha contra el narcotráfico, especialmente contra los seis cárteles que recientemente fueron designados como organizaciones terroristas por Washington. “Queremos que el gobierno mexicano se ayude a sí mismo, y también que en el proceso ayude a los estadounidenses, al tomarse en serio a estas organizaciones”, señaló.
El vicepresidente también destacó la importancia de empoderar a las fuerzas de seguridad en la frontera. “He escuchado de varias personas con las que he hablado en la Patrulla Fronteriza que todo lo que necesitábamos hacer era empoderar a estos muchachos para que hicieran su trabajo”, comentó, en referencia a los soldados y personal aduanero desplegados en la zona. La semana pasada, Hegseth ordenó el envío de 3 mil soldados adicionales a la frontera con México.
En su discurso, Vance advirtió sobre las consecuencias de no controlar a los cárteles, afirmando que esto podría llevar a México a convertirse en un “narcoestado” donde estas organizaciones tengan más poder que el propio gobierno. Según el vicepresidente, el plan de acción actual no solo beneficia a Estados Unidos, sino que también representa un “gran favor” para el pueblo mexicano.
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La visita de Vance refuerza la postura de la administración Trump sobre la seguridad fronteriza y la lucha contra el narcotráfico, al tiempo que subraya la necesidad de una colaboración efectiva entre ambos países para enfrentar estos desafíos comunes.
Con información de Milenio