Joaquín «El Chapo» Guzmán, el exlíder del Cartel de Sinaloa que cumple una condena de cadena perpetua, ha obtenido finalmente la autorización del gobierno estadounidense para reunirse con su abogado, Israel José Encinosa, en la prisión de máxima seguridad donde se encuentra recluido. Esta decisión se produce después de que Guzmán denunciara haber estado sin contacto legal durante más de diez meses.
El narcotraficante mexicano, extraditado desde México y condenado por delitos relacionados con el tráfico de drogas, está sujeto a las medidas de seguridad más estrictas de todo el sistema penitenciario. Fue su equipo de defensa el que solicitó formalmente la posibilidad de mantener una comunicación regular con su cliente, argumentando que se le estaba impidiendo el contacto vital con su representación legal.
Inicialmente, el caso fue dirigido al juez Brian Cogan, quien había recibido una carta escrita a mano por el propio Guzmán en la que detallaba su situación. Sin embargo, el juez aclaró que no tenía jurisdicción para revisar las condiciones carcelarias de Guzmán y señaló que cualquier solicitud para visitas de abogados debía ser presentada formalmente por la defensa, y no por él.
La autorización para la visita de Encinosa marca un punto de inflexión en lo que ha sido un estricto aislamiento para Guzmán desde su encarcelamiento, y representa un paso para garantizar que se respeten sus derechos a la representación legal.
Con información de Milenio
