La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) ha otorgado su autorización para la construcción de una terminal de carga del Tren Maya en Cancún. El proyecto, a cargo de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), recibió la aprobación a través de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), un paso crucial para su avance.
Sin embargo, la aprobación no es incondicional. La Semarnat ha especificado que se deberá obtener una autorización adicional, centrada en el suministro de diésel para el autoconsumo del sistema ferroviario. Esto significa que la autorización actual no cubre la distribución de combustible a terceros, sino únicamente el necesario para la operación de los trenes. La responsabilidad de tramitar este permiso recae en la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA), una entidad desconcentrada de la Semarnat.
Según se lee en la MIA, “la promovente deberá de realizar las gestiones necesarias para obtener la autorización correspondiente en materia de impacto ambiental para actividades del sector hidrocarburos ante la ASEA”. Esta autorización debe estar lista antes de que la terminal de carga entre en funcionamiento, asegurando que se cumplan las normativas ambientales relacionadas con el manejo de combustibles.
El documento también ofrece detalles sobre la infraestructura de almacenamiento de diésel. La terminal contará con dos tanques con capacidad de 240,000 litros cada uno, totalizando un almacenamiento de 480,000 litros de diésel. Además, se incluirá un tanque de 20,000 litros para un líquido agotador de emisiones de diésel (DEF).
Este sistema de almacenamiento, que equivale a 3,018 barriles, se encuentra por debajo del umbral de las Actividades Altamente Riesgosas, según la MIA, lo que facilita el proceso de aprobación inicial.
A pesar de los planes previamente anunciados por la presidenta Claudia Sheinbaum en su conferencia matutina sobre el transporte de hidrocarburos, incluyendo turbosina para el Aeropuerto Internacional de Cancún, la MIA de la terminal de carga no menciona nada al respecto. El documento se enfoca exclusivamente en la infraestructura necesaria para la operación de los trenes y su autoconsumo, dejando fuera los planes de distribución de combustible para otras necesidades de la región.
Con información de Marcrix noticias
