Un joven compartió su inusual experiencia al intentar obtener una membresía en la cadena de tiendas Costco. A través de TikTok, reveló cómo su apellido, «Pastor», se convirtió en un obstáculo inesperado.
El proceso parecía sencillo: solicitar la membresía, pagar la cuota y obtener la credencial. Sin embargo, cuando llegó el momento de recibir su tarjeta de membresía, todo cambió. El empleado que lo atendía llamó a su supervisora, y la razón fue sorprendente: el apellido «Pastor» estaba en una lista de «nombres prohibidos».
¿Por qué? Según la tienda, el apellido podría relacionarse con la iglesia o temas religiosos. El joven intentó negociar, incluso sugiriendo que su nombre apareciera como «Misael de León» para evitar la referencia al apellido problemático. Sin embargo, sus peticiones fueron rechazadas.
El caso plantea preguntas sobre discriminación y precaución. ¿Es legítimo que una tienda prohíba un apellido? ¿O es simplemente una medida para evitar confusiones? Sea cual sea la respuesta, este joven se quedó sin membresía y sin acceso a las ofertas de Costco.
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En resumen, la historia de este joven nos recuerda que incluso en trámites aparentemente simples, los nombres pueden tener un impacto significativo. ¿Debería Costco reconsiderar su política de «nombres prohibidos»? La discusión está abierta.
Con información de Milenio