El estado de Puebla se encuentra en estado de shock tras el feminicidio de Eva, una maestra jubilada, ocurrido el pasado lunes 26 de agosto, coincidiendo con el primer día del regreso a clases. El principal sospechoso del crimen es su propio hijo, Saúl, de aproximadamente 30 años.
El trágico incidente tuvo lugar en una vivienda de la colonia San Antonio, en el municipio de Acatlán de Osorio. Según los primeros informes, Saúl, quien padece esquizofrenia, sufrió una crisis que lo llevó a atacar a su madre con una piedra, golpeándola repetidamente en el rostro y el cuerpo. Eva perdió la vida debido a la gravedad de las heridas.
Vecinos de la familia, alarmados por los ruidos, solicitaron asistencia médica de inmediato. Sin embargo, cuando los servicios de emergencia y las fuerzas de seguridad llegaron al lugar, Eva ya no presentaba signos vitales.
Los residentes locales han señalado que Saúl tenía antecedentes de problemas mentales, lo que podría haber influido en su comportamiento violento. Aunque se especula que el ataque fue resultado de un episodio de ira descontrolada, esta información no ha sido confirmada oficialmente.
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La Fiscalía General del Estado (FGE) ha iniciado una investigación para esclarecer los motivos del feminicidio y determinar la responsabilidad de Saúl, quien ha sido detenido. Mientras tanto, en redes sociales se han multiplicado las manifestaciones exigiendo justicia para Eva.
Con información de Heraldo
