La comunidad de Buenos Aires se encuentra en estado de conmoción tras la trágica muerte de Thiago Díaz, un niño de 13 años, quien perdió la vida mientras jugaba a las escondidas con dos amigos. El suceso ha generado indignación entre los habitantes, ya que las circunstancias de su muerte aún no están claras.
Según los primeros informes, el incidente ocurrió el pasado viernes 13 de septiembre. Thiago había regresado de la escuela y, tras unos minutos en casa, salió a jugar con sus amigos en la calle Esteban Gómez al 800. Durante el juego, Thiago se escondió detrás de un árbol y, momentos después, les dijo a sus amigos “ahora vengo” antes de correr hacia su casa, donde se desplomó en el suelo.
Los amigos de Thiago, al acercarse, descubrieron que estaba herido y desangrándose. A pesar de que sus padres lo llevaron de inmediato a un hospital local, los médicos no pudieron salvarle la vida, y fue declarado sin signos vitales. Los especialistas determinaron que Thiago murió debido a un shock hipovolémico causado por una grave herida en la parte alta del abdomen.
Las autoridades están investigando el caso y, hasta ahora, sugieren que podría tratarse de un suicidio, ya que las cámaras de seguridad no muestran a ninguna persona cerca del árbol donde se escondía Thiago. Sin embargo, los familiares del menor rechazan esta hipótesis y exigen una investigación exhaustiva. “Yo pienso que alguien me lo lastimó. Eso lo puedo asegurar. Porque se corrieron muchas versiones de que él se pudo haber apuñalado solo. No se pudo haber lastimado solo”, declaró Mercedes, la madre de Thiago, a medios locales.
Mercedes también mencionó que hay un video de seguridad en el que se ve a Thiago sentado en un bolsón de arena frente a una casa con sus amigos. Posteriormente, se les ve corriendo hacia la esquina, y luego a Thiago cruzando de esquina a esquina, seguido de sus amigos, quienes parecen asustados.
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Las autoridades también están investigando la posibilidad de que Thiago tuviera dos cuchillos en su poder, con los cuales podría haberse herido accidentalmente. “El niño solía llevar uno o dos cuchillos en la cintura”, declaró un portavoz de las autoridades. No obstante, esta situación no ha sido confirmada por los padres del menor, quienes insisten en que se esclarezca si alguien más estuvo involucrado en la muerte de Thiago.
Han pasado 11 días desde el trágico suceso y aún no hay avances significativos en la investigación. La comunidad de Buenos Aires espera respuestas y justicia para Thiago Díaz.