Agentes de la Policía Estatal detuvieron a 92 policías municipales de Comitán de Domínguez, acusados de motín y ejercicio ilegal de funciones por obstruir un operativo de seguridad el pasado domingo. Según informaron el fiscal general del estado, Jorge Luis Llaven Abarca, y el secretario de Seguridad del Pueblo, Óscar Alberto Aparicio Avendaño, los detenidos canalizaban información a distintos grupos sociales para que bloquearan vías de comunicación en la zona.
Durante el operativo, también fueron arrestadas 30 personas más, acusadas de atentados contra la paz, bloqueo de vías de comunicación, agresiones al personal de seguridad y destrucción de cámaras del sistema de vigilancia C-5. Estos individuos utilizaron camiones de carga para dañar el sistema de videovigilancia y evitar ser identificados.
En una conferencia de prensa junto al gobernador, Óscar Eduardo Ramírez Aguilar, el fiscal Llaven Abarca precisó que los 92 policías municipales fueron trasladados a Tuxtla Gutiérrez, donde se definirá su situación jurídica. Llaven Abarca indicó que la acción policial en Comitán de Domínguez se enfocó en combatir el delito de homicidio, dado que recientes ejecuciones en Chiapas se derivaron de disputas por la venta de droga al menudeo.
El fiscal explicó que, con este propósito, se decidió iniciar un operativo frontal contra el narcomenudeo en Comitán de Domínguez. Durante la operación, se solicitaron 25 órdenes de cateo, se destruyeron 25 tiendas dedicadas al narcomenudeo, se detuvo a 13 personas y se aseguraron drogas como marihuana, cocaína y cristal, además de dinero en efectivo.
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El secretario Aparicio Avendaño añadió que el domingo se dio el banderazo de inicio del operativo con la Fuerza de Reacción Inmediata Pakal (FRIP) en Comitán de Domínguez. Como resultado, la Secretaría de Seguridad del Pueblo (SSP) asumió el control del sistema de vigilancia C-5 en las instalaciones de la Policía Municipal de Comitán de Domínguez, llevando a cabo varios cateos programados.
Durante el operativo, agentes de la Policía Municipal agredieron al personal de seguridad, los encañonaron y los expulsaron del C-5, iniciando bloqueos con grupos que muchas veces obligan a la población a participar. Aparicio Avendaño subrayó la necesidad de cooperación de los municipios pequeños en materia de seguridad, destacando que la falta de comunicación puede complicar la efectividad de las operaciones policiales.
Con información de Milenio
