En Tianguismanalco, Puebla, un intento de linchamiento desencadenó una noche de caos y violencia después de que un hombre fuera acusado de intentar robar en una vivienda. La situación se agravó cuando, a pesar de la intervención de la policía municipal, los enfurecidos pobladores se dirigieron a la comandancia con la intención de sacar al sospechoso y hacer justicia por su propia mano.
Gracias a la activación de protocolos de seguridad y la intervención de las autoridades, se logró evitar el linchamiento. Sin embargo, la acción policial provocó aún más la ira de la multitud, compuesta por aproximadamente 200 personas. En represalia, los habitantes incendiaron dos patrullas municipales, vandalizaron tres automóviles particulares y dañaron dos motocicletas.
Tras horas de tensión y actos vandálicos, las autoridades finalmente lograron controlar la situación y restablecer el orden en la comunidad.
Este incidente ocurre pocos días después de otro hecho violento en el municipio de Atzitzihuacan, también en Puebla. El pasado 8 de diciembre, tres hombres fueron linchados por habitantes locales tras ser acusados de intentar secuestrar a una niña de cinco años, quien logró escapar y alertar a los vecinos. La multitud, enardecida, capturó a los presuntos responsables, los trasladó a un campo y los colgó.
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A pesar de la intervención de las autoridades municipales y estatales y la activación de protocolos de prevención, el linchamiento no pudo ser frenado. La Fiscalía General del Estado de Puebla lamentó los hechos, detallando que la autoridad local acudió como primer respondiente, pero ya no encontró signos vitales en los tres hombres debido a las heridas provocadas. Por su parte, el gobierno estatal condenó lo ocurrido y anunció que cooperará con la Fiscalía para llevar a cabo las investigaciones correspondientes y deslindar responsabilidades.
Con información de Excélsior
