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Aunque la caza furtiva está castigada con penas que van de seis meses a nueve años de prisión según la legislación ambiental vigente, la caza del jaguar, una especie en peligro de extinción, no ha cesado. Recientemente, un jaguar fue abatido en Yucatán y su cuerpo fue desmembrado.
Un video, que ha circulado en redes sociales, muestra el momento en que un jaguar es desollado.
Además, el animal es destazado en una carnicería, donde se ve claramente el rostro del carnicero e indica que se lo comerán en venganza porque el jaguar se alimentó del ganado previamente.
Las autoridades no se han pronunciado al respecto ni anunciado una investigación para dar con los responsables.