El presidente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro Moreno, conocido como Alito, informó sobre el trágico asesinato de Alejandro Arcos, presidente municipal de Chilpancingo, Guerrero, ocurrido la noche del domingo 6 de octubre. Este lamentable suceso se produce apenas tres días después del hallazgo del cuerpo sin vida de Francisco Tapia, secretario del ayuntamiento de Chilpancingo.
A través de su cuenta en la red social X, Moreno expresó su pésame y solidaridad con las familias de las víctimas, y anunció que el PRI solicitará a la Fiscalía General de la República (FGR) que atraiga las investigaciones para esclarecer estos crímenes. «Dada la situación de ingobernabilidad en Guerrero, estaremos pidiendo a la @FGRMexico que atraiga las investigaciones de ambos asesinatos», escribió el dirigente.
Las víctimas, descritas por Moreno como «funcionarios jóvenes y honestos que buscaban progreso para su comunidad», no habían cumplido ni una semana en sus cargos cuando fueron asesinadas. La Fiscalía General del Estado (FGE) de Guerrero ha abierto una carpeta de investigación por homicidio calificado contra quien o quienes resulten responsables.
El cuerpo de Alejandro Arcos fue encontrado en una camioneta abandonada en la colonia Villa Roble, en el sector poniente de Chilpancingo. La cabeza de la víctima estaba sobre el toldo del vehículo, mientras que el resto del cuerpo, cubierto con una cobija, se encontraba en el interior. La identificación fue posible gracias a una credencial de elector a nombre de Arcos.
Personal de los Servicios Periciales de la FGE acudió al lugar para realizar las diligencias correspondientes y trasladar el cadáver al Servicio Médico Forense (Semefo). La gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, condenó enérgicamente el asesinato y aseguró que se llevarán a cabo las investigaciones necesarias para llevar a los responsables ante la justicia.
La última actividad registrada de Arcos en su página de Facebook lo ubicaba en la comunidad de Tepechicotlán, atendiendo las afectaciones provocadas por el huracán John. Tras perder contacto con él y su equipo, la incertidumbre prevaleció en la capital del estado durante más de tres horas.
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Familiares de Arcos ya se encuentran en las instalaciones del Semefo para reclamar el cuerpo. La comunidad de Chilpancingo y el estado de Guerrero se encuentran consternados por estos actos de violencia que han cobrado la vida de dos de sus funcionarios en tan poco tiempo.
Con información de Milenio