Una pareja de Kansas enfrenta graves acusaciones por un presunto fraude de jubilación que asciende a más de $215,000. Según las autoridades, Lynn y Kirk Ritter, ambos de 61 años, cobraron fraudulentamente las prestaciones de jubilación de un pariente fallecido, Mike Carroll, durante seis años mientras ocultaban su cadáver en su casa.
El marcapasos de Carroll indicó que murió en 2016 a la edad de 81 años. Sin embargo, su cuerpo no fue descubierto hasta 2022, cuando Kirk Ritter informó a la policía de Overland Park sobre su muerte.
Los fiscales alegan que los Ritter continuaron depositando y gastando dinero de la cuenta bancaria de Carroll, incluso cuando su cuerpo se encontraba “momificado” en una cama de su propiedad. Lynn Ritter es la hija de Carroll.
Familiares de Carroll informaron al Kansas City Star que los Ritter les daban constantemente excusas sobre por qué Carroll no podía atender una llamada telefónica o visitarlos, lo que les hizo creer que Carroll todavía estaba vivo.
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La pareja está programada para comparecer ante un tribunal federal el 2 de febrero para enfrentar varios cargos. No han respondido a los mensajes telefónicos ni a los correos electrónicos del periódico, y no se ha asignado un abogado defensor en los documentos judiciales.
Los fiscales revelaron que los pagos de pensión y Seguridad Social que Carroll recibió durante los seis años posteriores a su muerte ascendieron a $216,067. Sin embargo, los registros bancarios de esa época mostraban que Lynn y Kirk Ritter emitían cheques desde su cuenta bancaria y los cobraban.