Un nuevo episodio de conflicto por el acceso a las playas mexicanas se vivió el pasado 20 de abril en el municipio de Progreso, cuando una pareja con doble nacionalidad, mexicana y canadiense, intentó impedir que residentes locales disfrutaran de la costa durante las festividades en honor a San Telmo, el santo patrono de la comunidad.
#YUCATÁN #PROGRESO Fuereño se molesta por automóviles estacionados frente a su casa en Progreso y se enfrenta a visitantes y vecinos de este puerto. pic.twitter.com/N2Vr4IpuJp
— Desde el Balcón (@desdebalcon) April 20, 2025
Según relatos de los presentes y un video que rápidamente se viralizó en redes sociales, la controversia se desató cuando la pareja mostró su molestia por la presencia de vehículos estacionados cerca de su propiedad. Los pobladores, quienes se encontraban celebrando y disfrutando del mar como es tradición durante estas fechas, reconocieron que algunos automóviles se encontraban en una zona de manglares.
En la grabación, se observa al hombre, visiblemente alterado, exigiendo a los visitantes que retiraran sus vehículos de inmediato. Su argumento principal, según manifestaron los asistentes a la playa, era que tras las celebraciones, los visitantes suelen dejar basura en el área, una tarea de limpieza que recae sobre él.
«Ustedes vienen a contaminar con sus put@s chelas y luego están bien pedos. Afectan a los peces. ¡Cuida la naturaleza, la naturaleza sí existe, cabrón!», se escucha reclamar al hombre en el video, evidenciando la frustración y el enojo de la pareja ante la presencia de los festejantes.
La situación escaló hasta el punto de requerir la intervención de Erik Rihani, el alcalde de Progreso, según informaron medios locales. La presencia del edil buscó mediar en la disputa y evitar que el conflicto se agudizara.
Finalmente, los vehículos fueron movidos del área cercana a la residencia de la pareja, permitiendo que la celebración en honor a San Telmo continuara sin mayores incidentes. Sin embargo, este hecho se suma a la creciente preocupación por los conflictos relacionados con el acceso a las playas públicas en México, donde en ocasiones residentes extranjeros o propietarios de inmuebles frente al mar intentan restringir el disfrute de estos espacios a la comunidad local. Este último incidente en Progreso pone de manifiesto la necesidad de encontrar un equilibrio que garantice tanto el respeto por la propiedad privada como el derecho de los ciudadanos a disfrutar de las costas mexicanas.
Con información de Excelsior