Ante la inminente llegada del huracán Erick, que se espera toque tierra entre Oaxaca y Guerrero este jueves, el gobierno de Guerrero ha activado un plan de contingencia integral, en estrecha colaboración con las autoridades federales. Se anticipan lluvias torrenciales, crecidas de ríos y arroyos, deslaves e inundaciones en zonas bajas, lo que ha llevado a las autoridades a tomar medidas preventivas urgentes.
La zona de alertamiento por el huracán se extiende desde Puerto Ángel, Oaxaca, hasta Acapulco, Guerrero, mientras que la zona de vigilancia abarca desde Acapulco hasta Tecpan de Galeana, también en Guerrero. Esta delimitación busca asegurar que las áreas de mayor riesgo estén debidamente informadas y preparadas para el impacto del fenómeno.
Como medida de precaución para salvaguardar la integridad de los estudiantes, se ha anunciado la suspensión de clases en todos los niveles educativos los días 18 y 19 de junio. Además, el gobierno estatal ha habilitado 582 refugios temporales en toda la entidad, listos para acoger a las familias que necesiten evacuar sus hogares.
La gobernadora de Guerrero, quien participó en la conferencia matutina encabezada por la presidenta Claudia Sheinbaum, informó sobre la entrada en sesión permanente del Consejo Estatal de Protección Civil. «Aquí seguimos, presidenta, con todo el trabajo», afirmó la gobernadora. «Vamos a continuar en estas siguientes horas con el perifoneo intenso, con toda la información, coordinación y comunicación con las presidentas, presidentes municipales y, por supuesto, con la población. Sigamos unidos, con responsabilidad y con esperanza, por todas las familias guerrerenses».
Según la Coordinación Nacional de Protección Civil, se prevén afectaciones en al menos diez municipios de Guerrero, lo que subraya la seriedad de la amenaza y la necesidad de que la población permanezca atenta a los comunicados oficiales y siga las indicaciones de las autoridades.
Con información de Milenio