Un nuevo capítulo se ha escrito en la compleja trama de la violencia política en México, con la vinculación a proceso de María Elena “N”, alcaldesa de Amanalco, por su presunta participación en el doble homicidio del síndico Miguel Ángel Lara de la Cruz y su chofer.
Un juez del Estado de México determinó que existen suficientes elementos para considerar a la edil como la autora intelectual de este crimen, ocurrido en enero de 2023. Según la investigación, la alcaldesa habría ordenado el asesinato de Lara de la Cruz por diferencias políticas al interior del cabildo, las cuales habrían escalado hasta alcanzar niveles de violencia extrema.
La detención de la alcaldesa se llevó a cabo durante el “Operativo Enjambre”, un despliegue conjunto de fuerzas estatales y federales diseñado para capturar a objetivos de alto perfil. Las autoridades señalaron que existen pruebas contundentes que vinculan a María Elena “N” con el crimen, incluyendo testimonios de personas que habrían escuchado una llamada telefónica en la que la alcaldesa daba la orden de ejecutar al síndico.
La investigación ha revelado detalles escalofriantes sobre el modus operandi de los asesinos, quienes habrían emboscado a las víctimas en Zacazonapan y posteriormente ocultado sus cuerpos en un paraje solitario. Además, se ha establecido que la alcaldesa mantenía presuntos vínculos con grupos del crimen organizado, a quienes habría proporcionado información confidencial sobre operativos policiales.
Las autoridades también han señalado que existía una compleja red de corrupción y violencia al interior del ayuntamiento de Amanalco, en la que la alcaldesa y el síndico se disputaban el control de los recursos municipales. Según la investigación, ambos funcionarios habrían pactado con grupos criminales para asegurar su poder y enriquecerse ilícitamente.
Por su parte, la defensa de María Elena “N” ha anunciado que analizará la posibilidad de impugnar la resolución del juez. El abogado de la alcaldesa argumentó que el plazo de investigación de dos meses y medio es excesivo y que su clienta es inocente de los cargos que se le imputan.
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Este caso ha generado gran conmoción en el Estado de México y ha puesto en evidencia la gravedad del problema de la violencia política en el país. La vinculación a proceso de la alcaldesa de Amanalco es un duro golpe para la confianza ciudadana en las instituciones y representa un desafío para las autoridades, quienes deberán trabajar arduamente para esclarecer los hechos y llevar ante la justicia a todos los responsables.
Con información de Milenio